Un pebetero para aromatizar las noches de verano.

Buenas a todas y todos,
me gustaría enseñaros un pebetero que hice recientemente y no podía enseñar hasta ahora.

El motivo de elegir estos colores ha sido porque participo en el reto del mes que organiza APE para los socios. Esta vez, se ha elegido una foto con una paleta de color, que debía servirnos de inspiración.

Después de darle muchas vueltas, no se me ocurría nada, así que empezé por mezclar colores y sacar la paleta en arcilla. He usado PREMO.

Aquí tenemos las diferentes mezclas en proceso, hasta conseguir lo más parecido a la paleta ofrecida. Mezclando con translúcido, blanco, perlados, quitando brillo con negro... En fin, que ya sabéis cómo va esto, con un cortador para saber en cada momento cuánta arcilla tomamos de cada color y anotando lo que se va haciendo, que luego no nos acordamos lo que hemos puesto y es un drama. De hecho usé violeta y fucsia para las mezclas y tuve que repetirlas porque las apunté intercambiadas, así que no había manera de que volvieran a salir, hasta que me dí cuenta. Después de mucho pelear, estas son las definitivas. El morado oscuro parece azul, pero no lo es. Va al 50% en azul cobalto y fucsia y con negro que fui añadiendo poco a poco hasta que me gustó el tono.

Ya tenía los colores, ahora había que decidir qué hacer con ellos...
Y empecé con distintos degradados. El azul con el amarillo estaba bien, pero el verde oscuro que aparecía en medio, me daba poco juego,

 así que opté por meter los malvas en medio... esto ya es otra cosa, ¿no?

La lámina de degradados final es esta.

Vuelta a pensar, ¿qué hago yo con esta lámina taaaaaan bonita?

Pues vamos a la arcilla de descarte, que para eso está.

Hice este pebetero que me convenció al 200%

¿Y dónde coloco el incienso?

¿Decoro el fondo?

No os aburro con más información sobre galeradas que descarté.

El proceso de creación, seguro que le resulta familiar a más de una y de dos.

Al final opté por curvar bordes y enrollar los extremos, el fondo texturizado sólo con la fecha que no quita protagonismo al degradado  y el incienso se posa sobre una S hecha con un churro de degradado enrollado sobre sí mismo y luego en forma de S.

Sencillo pero muy bonito, para estas largas tardes de junio que se prestan a cenar en la terraza o jardín. Me gusta mucho adornar las mesas para comer o cenar, sobre todo cuando es algo que se sale de lo ordinario, ya sean amigos que vienen a cenar ya sea que nos movemos al jardín/porche/terraza...

 Hoy, cuando buscaba el incienso para hacer las fotos, recordaba uno de los primeros pisos en que viví hace muchos muchos años. No teníamos mucho espacio y el balcón era minúsculo, cabía una mesilla y dos sillas en fila india, pero nos gustaba mucho preparar una ensalada, un gratinado de verduras o un gazpacho y tomárnoslo sentados en el balcón en frente del parque de La Ciudadela, que era a donde daba ese minibalcón.

Espero que os haya gustado tanto como a mí.
Un saludo.