El sábado hizo un día de perros, los niños estaban muy pesados y poco he podido avanzar en mis labores, así que nos hemos dedicado al teñido de telas.
Para el experimento tenía Aida blanca y crema muy clarito, ésta es la que he teñido con café. Puse a partes iguales, más o menos, café bien fuerte con agua y dejé hervir unos 20 minutos. Añadí vinagre y sal, removí bien y lavé con jabón y aclaré con agua fría y dejé secar en horizontal. Para la blanca hice el mismo proceso pero con cebolla (se cuece la parte exterior de la cebolla, las hojas marrones de fuera que están secas...). Queda un color tostado muy bonito, en las fotos parece que queda tan oscuro como con el café, pero es mucho más clarito. También he usado colorante alimenticio azul oscuro, esta vez con agua fría a la que añadí un chorrito de colorante. Para mi sorpresa, éste último ha dado un color rosa a la tela, parecía que iba a quedar mucho más oscuro, pero se baja mucho el tono con el aclarado. Os pongo las fotos, en cada una, la tela original es la más clara. Os animo ha hacer experimentos, muchas veces tenemos telas que compramos porque la medida es la que es y no las usamos porque nos parecen sosas, darle un aire diferente está en vuestras manos.
Un saludo.
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